Ana María Grandoso

Ventanas*

Nos paramos frente al mar, que nos contempla.
Pero estamos siempre al costado del río que pasa sin mirarnos,
desdeñosamente.
Juan José Saer

Trepada a la barda del río

Trepada a la barda del río
ese vigía sin atalaya
la tarde que se va, se va
la casa flota
río arriba o río abajo
al ritmo de la marea que trae el mar

lleva el río, las vistas del río
las regatas, las lanchas, los cormoranes
los sauces
la tarde, la luna en ascuas
en las ventanas. 


Temporal de invierno

Temporal de invierno
entre vaharadas de sol
que sale y se esconde
cortinas de agua
nubes cambiantes
el río resigna el color al de las nubes
su movimiento de superficie a los vientos
el espectáculo es el que hace la luz
cuando cae es tan pródiga
como nada nadie
y para adentro nos henchimos
prometemos volver.


Es una dicha

Es una dicha, casi de reina
vivir entre bastidores verdes
con ventanas hacia un lado y el otro
algunos techos con su gato negro
y agua, agua del río
¿y ser dichosa qué es?

un sueño de los primeros años
cuentos de Hansel y Gretel
hongos rojos con lunares

descansa la cabeza en las almohadas
entra el sol
oblicuo, de la mañana
la tarde es larga
un camino de sirga, río arriba
nunca hollado

la cortina cuela una luz
su movimiento es un baile ruso
pero suave como un vals.


Los ojos ven

1
Los ojos ven
las palabras nacen ciegas
como gatos

2
Sobre el vidrio de una mesa de jardín
jardín de la soledad bien administrada
pasan nubes, se unen
pájaros irrumpen en la visión
fugados
(así medito, en una corola)

3
Miro hacia abajo para ver el cielo
extraña paradoja de la quietud
(lo que está quieto o se mueve suave
seduce)

4
Un viento de comienzos de otoño
hamaca lo verde
el susurro de los álamos, más allá
es muy leve

5
Un bichito camina sobre el papel
una paloma turca come frutos negros sin parar

6
Estoy de viaje
(sentada y absorta)

7
Los horneros hacen su escándalo

8
Han vuelto las mariposas blancas
revolotean, sin posarse, largo rato

9
La intemperie, en otoño recién venido
es un abrigo de seda
(su calor me dura hasta la noche)

10
No vinieron los abejorros negros
que hacen inclinarse a las campanillas
para libarlas
pero en algún pueblo
están matando.


El pájaro

El pájaro se posa sin ruido
pájaro
que toca con sus patas una rama

qué triste tarde mira
a través de la nube de jejenes
en la cabeza
pantalla sin sonido
las veredas, los cartones y colchones
la selfie
de la gran ciudad.


Beso en la nuca

A veces le da un beso
en la nuca
esta vez, ella se da vuelta
se encuentra con sus ojos
algo volvió
en un instante

su cuello, levemente inclinado
sobre platos, vasos
debe provocar una conmoción
a escala cotidiana
porque a veces
le da un beso
en la nuca.


La pena

La pena
que no había visto ni oído
estaba por llegar
contrariando su búsqueda de belleza

las tardes fueron así
un fulgor en el horizonte
desde que las contempla

también la niebla es admirable
cuando no es metáfora

¿quién pudiera portarse
como dueño de lo que no existe?

¿traer el mantel tan guardado
poner la mesa y esperar?


* Los poemas pertenecen al libro Movimiento de superficie, publicado en 2020 (Buenos Aires, Ediciones en Danza).


Ana Grandoso (Carmen de Patagones, 1946)

Poeta y narradora. En 2007 obtuvo el 2do premio en Concurso de Poesía del Fondo Editorial Rionegrino. En 2008, recibió Mención en el XXV Encuentro de Escritores Patagónicos de Puerto Madryn, Chubut. En 2013, Mención en el Premio Bienal Federal, Consejo Federal de Inversiones, categoría cuento.

Poesía
Movimiento de superficie, Buenos Aires, Ediciones en Danza, 2020
La naturaleza de las horas, Vela al Viento, Ediciones Patagónicas, 2018
Cinco poetas, Carmen de Patagones, Ediciones El Camarote, 2009

Antologías
Transversal, Poesía contemporánea de Río Negro (comp.: Graciela Cros), Fondo Editorial Rionegrino, 2020

Narrativa
Vamos al baile y verás (novela), Buenos Aires, Ediciones Ruinas Circulares, 2014

Links
Poemas. En La Infancia del Procedimiento